7 mitos sobre la caída del cabello

Todos conocemos mitos sobre la caida del cabello e incluso hemos llegado a creer que algunos eran ciertos. En la mayoría de los casos, aunque sean falsos, existe una explicación sobre por qué se han difundido y han empezado a formar parte del imaginario popular.

A continuación, vamos a ver siete de los más populares, analizaremos por qué no son ciertos y, si lo tienen, el motivo por el que podrían existir.

Índice

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1. Los siete mitos sobre la caída del cabello
2. Conclusión

Los siete mitos sobre la caída del cabello

Las creencias populares son muy variadas en lo que a la pérdida de cabello se refiere. Todos hemos escuchado a madres y abuelas decir «vas a ser calvo como tu padre» o «quítate esa gorra que así no te respira el pelo».

Sabemos que una buena alimentación y mantener el estrés bajo control pueden ayudar a prevenir en cierta medida la caída pero, ¿qué más creemos que es verdad y no lo es? Veamos algunos de los mitos en torno a la caída del cabello.

1. Solo tienen alopecia los hombres

Aunque es cierto que es más frecuente ver a hombres sin pelo que a mujeres, ellas también pueden sufrir alopecia. La pérdida de cabello femenina suele manifestarse más como una disminución generalizada de la densidad. Además del componente genético, puede estar provocada por otros factores como el estrés, la ansiedad, las hormonas o un uso frecuente de coletas muy tirantes.

Como hemos dicho al principio, estos mitos sobre la caída del cabello en mujeres surge porque enseñar la calvicie femenina es poco habitual, y no se exhibe con frecuencia de manera abierta por la calle. Aunque ellas también sufren la pérdida del cabello, entre las mujeres por desgracia es un tema aún considerado tabú.

2. La gomina o el champú pueden hacerte perder pelo

Todos los productos que se comercializan por una vía legal y que podemos encontrar en supermercados y grandes superficies tienen que cumplir con unos requisitos aprobados por Sanidad. Evidentemente, ningún organismo oficial aprobaría productos capilares perjudiciales para la salud de los consumidores, por lo que este mito sobre el pelo es falso.

Es cierto que, si no existe una correcta higiene capilar y no se utilizan jabones con capacidad para eliminar restos, puede producirse cierta acumulación de grasa y caspa que acabe perjudicando la salud del cuero cabelludo. En todo caso, esto nunca sería un problema de los productos utilizados, sino de una falta de higiene.

3. El pelo crece más si lo cepillas a menudo

Aunque no existen estudios científicos que lo desmientan, parece poco probable que el crecimiento del pelo esté relacionado con su cepillado. Dependiendo de la intensidad con la que realicemos los movimientos, pasarnos un peine puede incluso facilitar la rotura del cabello o debilitar algunas zonas, si son frecuentes los tirones o se hace con el pelo mojado.

Es cierto que el folículo piloso (donde se genera el pelo) se alimenta del riego sanguíneo, por lo que los masajes en el cuero cabelludo pueden ser beneficiosos para una melena más fuerte. En cualquier caso, en lugar de utilizar un peine o un cepillo, es más aconsejable emplear un masajeador específico o los propios dedos.

4. Teñirse el pelo puede producir alopecia

Aunque es uno de los mitos sobre la caída del cabello similares al de las gominas y champús, el proceso químico necesario para alterar el color del cabello hace que la explicación sea algo diferente. Dependiendo del tipo de tinte que utilicemos, su impacto en la fibra capilar puede ser mayor o menor, pero nunca debería provocar la pérdida o debilitación del folículo capilar.

En el caso de las decoloraciones, se trata de un producto químico agresivo que penetra en el cabello para despojarlo de sus pigmentos naturales. Al tratarse de un despigmentante muy potente, si no es utilizado por profesionales y entra en contacto con la piel durante más tiempo del recomendado, puede dañar el cuero cabelludo y la cutícula, haciéndola más quebradiza.

En definitiva, la decoloración no provoca alopecia per sé, pero sí puede dañar la hebra de pelo de manera irreparable.

5. Si su abuelo materno (o paterno) es calvo, usted también lo será

Se trata de una predicción excluyente que dice que si el abuelo materno tiene alopecia, su nieto la heredará. Esta creencia es muy popular, e insinúa que la alopecia solo se hereda a través de uno de los progenitores y que además salta una generación

Este es uno de los mitos sobre el pelo que encierra algo de verdad, aunque no acaba de tener sentido. El componente genético de la calvicie es importante, pero no depende de una rama en particular de la familia, y no se salta generaciones siguiendo una fórmula matemática. Al igual que podemos heredar indistintamente el color de ojos de nuestra madre o de nuestro padre, también podremos hacerlo con la caída del cabello.

6. La biotina es el remedio universal contra la caída del cabello

A todos nos ha pasado que, en el momento en el que comentamos con un amigo o familiar nuestra preocupación por la caída capilar, nos recomiendan automáticamente suplementos alimenticios con biotina, como si fuese la panacea y un remedio universal.

La ingesta de suplementos de biotina ayuda a mantener el cabello fuerte y sano y prevenir que se caiga. Sin embargo, su carencia no suele ser el motivo principal por el que el pelo clarea. Otros factores, como el componente genético del que hemos hablado antes, o cuestiones relacionadas con la inflamación del cuero cabelludo, pueden ser los detonantes de la alopecia.

Los suplementos, por tanto, hacen eso: suplementan. Pero no remedian una alopecia pre existente. Sin un diagnóstico capilar adecuado, es difícil saber qué tipo de calvicie se sufre, y si por tanto la biotina es la solución más adecuada en cada caso.

7. Las gorras, cascos y sombreros provocan calvicie

Llevar la cabeza tapada es el último en esta serie de mitos sobre la caída del cabello del que vamos a hablar. A menudo se justifica en que llevar la cabeza cubierta no deja «respirar» al pelo o que no llega la suficiente cantidad de oxígeno a la raíz. El folículo piloso se oxigena a través del riego sanguíneo, por lo que esta afirmación es completamente falsa.

Conclusión

En definitiva, vemos que la mayoría de mitos populares, aunque tienen una explicación o un por qué, son falsos. Acudir a la ciencia en lugar de a las recomendaciones de familiares y amigos nos ayudará a ahorrar tiempo, encontrar la raíz del problema y una rápida solución.

No todo lo que se dice sobre la salud capilar es cierto y algunos mitos sobre la caída del cabello se difunden y se popularizan sin control, haciéndonos creer ciertas creencias populares y afirmaciones sin ninguna base científica. Contar con profesionales del cuidado capilar para atajar nuestros problemas es la mejor garantía.