Mujer con pelo largo y canas mirando directamente a cámara

El envejecimiento del cabello a partir de los 50

El envejecimiento del cabello es un estadio vital por el que todos pasaremos una vez hayamos cumplido los 50 años. Si te preocupa el tema o simplemente quieres conocer qué efectos tendrá en tu día a día, en este artículo te vamos a contar todo lo que has de saber sobre el envejecimiento capilar, sus manifestaciones y sus consecuencias.

Índice


  1. ¿Por qué se produce el envejecimiento del cabello?
  2. Signos del envejecimiento del cabello que son iguales en hombres y mujeres
  3. El pelo en la menopausia
  4. En resumen

¿Por qué se produce el envejecimiento del cabello?

Igual que el resto del cuerpo, el pelo experimenta de una manera u otra los signos de la edad y el paso del tiempo. Estos cambios dependen fundamentalmente de tres factores: genética, estilo de vida y el cuidado que se le haya dado al cabello a lo largo de los años.

Por norma general, los primeros signos que evidencian el envejecimiento del cabello son los siguientes:

  1. Pérdida evidente de densidad y volumen
  2. Cabello más fino que, además, tarda más en crecer
  3. Aumento de la sequedad en el cuero cabelludo
  4. Cambios en la textura habitual. El pelo rizado puede volverse liso y viceversa
  5. Aparición de las canas

Ante esto no hay nada que puedas: el paso del tiempo es inexorable tanto para hombres como para mujeres. En este sentido, como veremos a continuación, los modos en los que se manifiesta el deterioro capilar en unos y otros no varían significativamente.

Signos del envejecimiento del cabello que son iguales en hombres y mujeres

Hombre con signos de envejecimiento del cabello

Vamos a desgranar los síntomas que evidencian el envejecimiento del pelo. Como es lógico, no en todos los casos tienen que darse al unísono y de forma idéntica. De hecho, es muy probable que a lo largo de la vida solo se experimenten uno o dos de los siguientes síntomas, sin tener que experimentarlos todos de manera progresiva.

Las canas a los 50

Una de las manifestaciones más evidentes del envejecimiento del cabello es la aparición de canas. Este proceso puede comenzar en etapas mucho más tempranas, en torno a los 30 años. En algunos casos, las canas pueden hacer aparición por primera vez en la veintena, debido a características genéticas individuales de la persona.

¿A qué se debe, entonces, el aumento repentino de canas a los 50? El tono del cabello depende de la cantidad de melanina presente en la hebra, un pigmento generado por el folículo piloso. Estas estructuras epiteliales son igualmente responsables del crecimiento del cabello.

Conforme se van cumpliendo años, estos folículos disminuyen la producción de melanocitos (las células de la melanina). El pelo por tanto no se vuelve blanco de la mañana a la noche: cuando un cabello de nuestro color habitual se cae porque ha entrado en fase telógena, si el folículo ha dejado de producir melanina el nuevo cabello nacerá blanco de raíz.

Es importante saber que el encanecimiento del pelo está determinado fundamentalmente por la genética, por lo que ni vitaminas ni complementos nutricionales tienen la capacidad de detener la aparición de las canas, más allá de intentar mantener los folículos lo más saludables posible.

Cambios en la estructura capilar

Otra consecuencia del paso del tiempo que se ve reflejada en la cabellera es la reducción de la velocidad con la que crece el pelo. Esto se debe a que el flujo sanguíneo que circula por la raíz del cabello disminuye con la edad, y el oxígeno, los oligoelementos y las vitaminas necesarias para el crecimiento normal llegan más lentamente y en menor cantidad.

Como consecuencia, las glándulas sebáceas rebajan la producción de sebo, esa grasa natural que sirve para hidratar y proteger tanto el cuero cabelludo como el propio pelo. Por este motivo, el cabello se va volviendo cada vez más seco y presenta mayor tendencia a quebrarse. Para compensar esta falta de hidratación natural, es recomendable lavar el cabello con productos que incorporen incorporen biotina para reactivar la circulación para reactivar la circulación y oxigenación en el cuero cabelludo.

Estos cambios dan como resultado un proceso de crecimiento ralentizado en el que, además, el pelo se va volviendo más fino, seco y con menos brillo. Es en esta etapa cuando los especialistas en salud capilar comienzan a hablar de los llamados cabellos planos que, aparte de ser menos densos, resultan más difíciles de peinar.

Caída de cabello

Aunque la caída del pelo no es un signo de envejecimiento del cabello que se de en el 100 % de los casos, esta manifestación suele resultar muy evidente para quien la sufre. La caída asociada al paso del tiempo a menudo conlleva ansiedad y estrés asociados, y la búsqueda de soluciones y tratamientos alternativos que ralenticen el adelgazamiento de la cabellera.

En estos casos es frecuente que se combinen diferentes motivos por los que el pelo comienza a caerse con más frecuencia en los 50:

  1. Pérdida de colágeno y queratina, que disminuyen significativamente con la edad y afecta a la densidad y grosor del pelo
  2. Cambios hormonales
  3. Alopecia androgénica de carácter hereditario

Es importante consultar con un especialista para llevar a cabo un diagnóstico y establecer un tratamiento.

El pelo en la menopausia

Mujer con pelo cano y largo escuchando música

Si bien antes señalábamos que las manifestaciones del envejecimiento capilar se dan indistintamente en hombres y mujeres, es evidente que la menopausia tiene un papel destacado en este proceso, debido a los grandes cambios hormonales que atraviesa el cuerpo femenino a partir de los 45 y 50 años de edad.

Como ya explicamos con anterioridad, la pérdida de grosor y la caída son definitorios del envejecimiento del cabello en esta década. A estos factores se suma que el pelo en la menopausia se puede volver más lacio y seco, o encresparse más fácilmente, debido a la caída en picado del nivel de estrógeno que experimenta la mujer en esta etapa.

Si este es su caso, no se alarme. La caída de pelo por la menopausia no suele derivar en una alopecia significativa. Lo más habitual es que las entradas se vuelvan algo más evidentes o que en algunas zonas el cabello se note más escaso o empiece a clarear.

Cada mujer es distinta y la menopausia no afecta a todas por igual. Dependerá fundamentalmente de la genética individual de cada una y, en menor medida, del estado del cabello.

En resumen

El envejecimiento del cabello es un estadio vital más, propio del paso de los años. Igual que la piel se arruga y pierde elasticidad, el pelo se ve afectado por el transcurso del tiempo, especialmente a partir de la cincuentena: aparición de canas, pérdida de densidad y volumen, caída acelerada del pelo…

Aunque es algo totalmente natural, si le preocupa su aspecto y no quiere renunciar a su imagen habitual, siempre es posible consultar con un especialista para conocer más a fondo qué tratamientos pueden resultar los más beneficiosos o cuáles están contraindicados. Retrasar el envejecimiento no es posible, pero navegar sus síntomas puede estar al alcance de la mano.