Hombre peinándose el cabello de la frente

Cómo identificar la caída anormal del cabello

¿Últimamente encuentra demasiados pelos en su cepillo, en la almohada o en el desagüe? Aunque perder pelo a diario es algo completamente natural, es importante saber cómo identificar los primeros signos de alarma de una caída anormal del cabello.

Veamos cuáles son los diferentes motivos por los que se cae el pelo, y cómo saber si debemos empezar o no a preocuparnos.

Índice


  1. Síntomas de la caída anormal del cabello
  2. Qué aspecto tiene la caída normal del cabello
  3. ¿Hay solución a este problema?
  4. En resumen

Síntomas de la caída anormal del cabello

La caída del cabello puede ser repentina o gradual, en función de qué la causa. No es lo mismo perder cabello por estrés, que normalmente sucede a la vez y de forma genérica en toda la cabeza, que la caída asociada a una predisposición genética, que se da de manera gradual durante varios años y siempre sigue el mismo patrón.

Al mismo tiempo, hay que tener en cuenta que la caída puede deberse a algo completamente normal: cada uno de los pelos y vellos que tenemos en el cuerpo tiene un ciclo de vida que termina con el pelo desprendiéndose del folículo para ser sustituido por uno nuevo.

Por lo general, una caída anormal del cabello va a estar marcada por alguno o varios de los siguientes síntomas:

  1. Aumento de la cantidad de cabello que aparece en el peine después del cepillado. Si esto no es algo puntual, sino que ocurre cada vez que se peina o ducha, manténgase alerta a otras señales significativas.
  2. El cabello ha perdido grosor. Analice el volumen del pelo cuando lo peina, o, si lo tiene largo, recogiéndolo en una coleta.
  3. Combinación de caída con un exceso de caspa y grasa.
  4. Picor intenso. Aunque no parezcan síntomas asociados, en ocasiones la caída puede estar provocada por dermatitis u hongos presentes en el cuero cabelludo.
  5. Aparecen pequeñas áreas con calvicie del tamaño de una moneda en la cabeza. Puede que previamente haya experimentado ciertas molestias o picor en la zona afectada.

Estos síntomas se corresponden con diferentes tipos de caída anormal del cabello, que veremos a continuación.

Qué aspecto tiene la caída normal del cabello

Hombre mirándose en el espejo si tiene caída anormal del cabello

Ahora bien, ¿qué se considera una caída normal del cabello? Los expertos coinciden en señalar que la media de cabellos que se pierden diariamente ronda los 100 pelos. Esta estimación se corresponde con el porcentaje de cabello que está en la última fase de su ciclo vital, que está compuesto por tres etapas:

  • Anágena o de crecimiento
  • Catágena o de transición
  • Telógena o de caída

La fase telógena tiene una duración aproximada de 100 días. Al final de la misma, el pelo se desprende para dar paso a uno nuevo, que reiniciará el ciclo al completo, de inicio a fin.

En cualquier momento dado, y cuando se dan las condiciones óptimas, en torno al 10% del cabello se encuentra en fase telógena, dentro de esa horquilla de 100 días. O lo que es lo mismo: la caída normal del cabello es toda aquella que respeta estos parámetros que permiten al pelo renovarse y mantenerse fuerte y sano.

En ocasiones, es normal que se caiga el pelo en mayor cantidad, fuera de estos parámetros, sin ser necesariamente alopecia. Esto es así por que, en determinadas circunstancias, el pelo puede acelerar su ciclo vital y entrar en fase telógena antes de tiempo. Cuando esto sucede se conoce como efluvio telógeno.

Estas circunstancias pueden abarcar desde efectos secundarios provocados por tratamientos de radioterapia y quimioterapia, hasta alteraciones hormonales, déficit de proteínas o vitaminas como el hierro, y el estrés. El efluvio telógeno es un tipo de caída del cabello difusa, que se manifiesta dos o tres meses después de experimentar alguno de los factores citados. Si ha pasado recientemente por procesos infecciosos con fiebre, situaciones de alto estrés físico o emocional o incluso un parto, puede notar una mayor pérdida del cabello.

La buena noticia es que estos procesos suelen durar un tiempo determinado, en torno a los seis meses. Una vez hayan pasado, verá como poco a poco recupera el cabello perdido.

El caso concreto de la alopecia

Tema aparte es la alopecia, una alteración que afecta directamente al cuero cabelludo, y sí clasifica como caída anormal del cabello.

Dentro de este concepto genérico encontramos varias clases de alopecia:

  1. Androgenética. También llamada calvicie común, es la más habitual. Se hace evidente a partir de los 30 años en la mayoría de casos, aunque puede aparecer mucho antes. Es más frecuente entre los hombres, ya que la predisposición genética a este tipo de alopecia está íntimamente ligada a la testosterona, y siempre sigue el mismo patrón: primero aparece en las entradas y coronilla, y va progresando lentamente hasta perder todo el pelo en la parte superior de la cabeza.
  2. Areata. La alopecia areata está motivada por un proceso autoinmune similar a la diabetes, la celiaquía o la artritis. Se caracteriza por provocar una caída del cabello en forma de parches circulares, repartidos tanto en la cabeza como por el cuerpo. Es un tipo de alopecia que suele aparecer y desaparecer en fases.
  3. Por tracción. Se produce por una excesiva tracción del cabello, por ejemplo a causa de peinados demasiado tirantes tipo coletas de caballo o trenzas.
  4. Difusa: Es un patrón de pérdida de cabello progresivo y generalizado. A diferencia de otros tipos de alopecia, la calvicie no se concentra en parches ni hace retroceder la línea de nacimiento del cabello. El patrón de crecimiento se mantiene igual, pero la densidad va disminuyendo poco a poco, el pelo se adelgaza, se hace quebradizo y seco. 
  5. Cicatricial. En este tipo de caída, el folículo piloso no solo se destruye sino que es reemplazado por tejido cicatricial, lo que dificulta cualquier tipo de tratamiento orientado a recuperar el cabello. Se trata de una afección permanente e irreversible, que requiere de atención médica especializada y a menudo el tratamiento es individual para cada paciente en función de lo que mejor le funcione. Dentro de este tipo de alopecia estaría por ejemplo la alopecia frontal fibrosante.

La mejor manera de averiguar qué causa la caída es consultar con un tricólogo o dermatólogo, especialmente si se detecta una caída anormal del cabello que se prolonga en el tiempo. Un especialista será capaz de emitir un diagnóstico y establecer un tratamiento a seguir.

¿Hay solución?

Mujer observando el cabello enganchado en el cepillo

Aunque la alopecia es padecida en mayor número por hombres (62 %), también hay mujeres (50 %) que ven cómo su seguridad y autoestima se va mermando conforme la pérdida de pelo es mayor.

Al hablar de soluciones es imposible hacerlo sin determinar antes la causa de la caida:

  • Si se trata de una caída reversible, como por ejemplo la alopecia por tracción o el efluvio telógeno, bastará con cambiar nuestros hábitos para volver a lucir nuestro cabello como siempre.
  • Si se trata de una caída progresiva e irreversible, cabe contemplar primero un tratamiento farmacológico que ralentice su avance, así como un tratamiento cosmético como el plasma rico en plaquetas. En última instancia, se puede optar por un trasplante capilar para repoblar las áreas afectadas por la caída.
  • Si la caída está asociada a un proceso inflamatorio, es de vital importancia consultar con un médico especialista e iniciar el tratamiento médico lo antes posible para evitar daños irreparables en el folículo y el cuero cabelludo.

Un buen diagnóstico dermatológico le dará la clave de cara a la recuperación de su pelo.

En resumen

La caída anormal del cabello es un tema que preocupa a la mayoría de la población en algún momento de su vida. Hombres y mujeres ven cada día como el volumen de su pelo decrece por alteraciones hormonales, déficits alimenticios, enfermedades de tipo cutáneo, estrés o aspectos relacionados con la genética.

Aunque es normal que se caiga el pelo, si esta situación se prolonga en el tiempo y cree que puedes estar experimentando los primeros estadios de la alopecia, consulte con un médico especialista. Será él quien determine con exactitud el diagnóstico y tratamiento más adecuado para su caso concreto.